La faena vacuna volvió a superar las 50.000 cabezas en la primera semana de junio, pero es posible que el nivel de actividad se modere por parte de la industria.

Los frigoríficos apuntan a sacar el pie del acelerador para no seguir sobrecalentando el mercado. La planta Carrasco de Minerva dio licencia desde el viernes 6 a su personal por casi 30 días.

En tanto, se prevé que el Tacuarembó de Marfrig opera con solamente uno de sus dos turnos. Los grupos brasileños tienen más margen para sacar presión mientras el resto están más limitados.

De acuerdo a los datos de INAC, en el acumulado del año hasta el 7 de junio la faena vacuna llegó a 1,083 millones de cabezas, 5,7% más que en igual período de 2024.